Antonio de Nebrija

El primer gramático del español

ESCRITURACORRECCIÓNGRAMÁTICA

Osvaldo Fernández

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Contexto

Hacia fines del siglo XV, cuando el Medioevo daba paso al Renacimiento y Cristóbal Colón iniciaba su viaje conquistador, un humanista sevillano publicaba un libro que cambiaría el destino de la lengua española: la Gramática sobre la lengua castellana. Considerada una de las primeras gramáticas de una lengua europea moderna, esta obra es un hito cultural sin precedentes.

Biografía

Antonio Martínez de Cala y Jarana nació en Lebrija (Sevilla) cerca del año 1441, hijo de Juan Martínez de Cala e Hinojosa y Catalina de Jarana y Ojo, agricultores acomodados. Su lugar de nacimiento, la antigua Nebrissa Veneria, le proporcionó el cognomen (o sobrenombre) por el que sería mundialmente conocido: Antonio de Nebrija.

A los quince años, un joven Nebrija llegó a la prestigiosa Universidad de Salamanca para estudiar Gramática, Retórica y Matemáticas. Sin embargo, se encontró con una enseñanza inmovilizada y métodos pedagógicos que oscurecían el saber en lugar de iluminarlo. Esta frustración fue la chispa que encendió su vocación: hacer del aprendizaje de las lenguas clásicas una experiencia accesible y agradable, una misión que guiaría toda su carrera.

En 1463 fue a estudiar a la Universidad de Bolonia, donde entró en contacto con el humanismo italiano y la filología clásica. Aquella experiencia transformadora le permitió comprender que las lenguas debían ser estudiadas como sistemas organizados y coherentes.

Regresó a la península como el primer gran humanista español y el principal introductor del Renacimiento italiano en el mundo hispánico. Dominaba el latín, el griego y el hebreo, y su gran ambición era modernizar los estudios gramaticales que él consideraba obsoletos en su país.

Obra Lingüística y Ortográfica

Cuando consiguió la Cátedra de Prima de Gramática en Salamanca, reafirmó su convicción sobre la necesidad de mejorar la enseñanza de la lengua latina. Su primera obra significativa fueron las Introductiones latinae (1481). Esta gramática latina representó una ruptura completa con el pasado por su claridad, concisión y corrección de errores. Incluyó el capítulo "De punctis clausularum", donde desarrolló sus ideas sobre la puntuación latina. Para ello, empleó un sistema binario con dos signos: un punto bajo (.) para cerrar la frase y dos puntos (:) para separar las unidades que la conforman. Sin embargo, no aplicó este sistema en el castellano.

Nebrija compuso dos diccionarios fundamentales: el Diccionario latino-español (1494) y el Vocabulario español-latino (1495). Estos trabajos lexicográficos fueron fundamentales para estandarizar el léxico castellano.

Las Reglas de orthographía en la lengua castellana fueron publicadas en Alcalá de Henares el 12 de mayo de 1517, constituyen la primera edición impresa de las normas ortográficas del español. En esta obra tardía, Nebrija expuso de forma sistemática uno de sus principios más revolucionarios: la correspondencia entre fonética y escritura. Su máxima era que se debía "escribir como se pronuncia y pronunciar como se escribe".

Estas obras establecieron un modelo para la lexicografía bilingüe y monolingüe posterior. Fueron herramientas esenciales para estudiantes, traductores y cualquier persona culta durante siglos.

La Gramática Castellana (1492)

Publicada el 18 de agosto de 1492, la Gramática sobre la lengua castellana constituye su obra cumbre. Está dividida en cinco libros: Ortografía, Prosodia y Sílabas, Etimología y Dicción, Sintaxis, Introducciones de la lengua castellana para extranjeros. Sus objetivos eran fijar y reglar la lengua, facilitar el aprendizaje del latín y difundir el castellano

También es justo mencionar que sus obras gramaticales no parten de cero, ya que se nutren de una rica tradición grecolatina, en la que destacan Prisciano, Diomedes y Donato, sin olvidar a Quintiliano. De ellos toma la base teórica y sobre esta elabora su doctrina, pero no acata todo lo que dicen sus predecesores latinos ni su obra es una mera traducción de ellos.

Sin embargo, a pesar de la importancia de esta obra y del éxito que ya había tenido con Introductiones latinae (con una tirada de mil ejemplares que se agotaron muy pronto y numerosas ediciones y reimpresiones); la Gramática de la lengua castellana fue un fracaso editorial. Empezó a recibir atención desde mediados del siglo XVIII.

Participación en la Biblia Políglota y la Denuncia de la Inquisición

Impulsada por el cardenal Francisco Jiménez de Cisneros, la Biblia Políglota fue un proyecto monumental para editar la Biblia en sus lenguas originales (hebreo, griego, arameo) junto a la Vulgata latina, con traducciones interlineales. Su objetivo era crear una herramienta rigurosa para teólogos, combinando el humanismo filológico con la fe católica.

Nebrija participó en el ambicioso proyecto en 1513. Su trabajo consistió en la elaboración del léxico del volumen V y en la revisión de la Vulgata, la traducción latina de San Jerónimo. Aplicó su enfoque crítico, comparando la Vulgata con manuscritos griegos y hebreos para restaurar el texto original. Esto implicaba corregir pasajes que consideraba "corruptos" por errores de transcripción.

Nebrija señaló errores gramaticales y de traducción en la Vulgata, argumentando que afectaban la comprensión teológica. Propuso que el texto bíblico debía estudiarse desde sus raíces hebreas, no solo desde el latín. Defendía la necesidad de acceder a la Biblia desde la perspectiva filológica, argumentando que pretender comentar las Escrituras sin tener en cuenta la filología era un trabajo estéril.

Conflicto con la Inquisición

En 1506, Nebrija enfrentó una denuncia ante la Inquisición dirigida por el inquisidor general Diego de Deza. Una de las acusaciones fue curiosamente la de ser "gramático", otras: cuestionar la inerrancia de la Vulgata, usar métodos filológicos “profanos” y promover el libre examen de la Biblia

En su defensa, Nebrija escribió la Apología (publicada hacia 1507), donde defendía su postura filológica y el papel central de la gramática en el estudio de las Escrituras. Nebrija logró sortear la denuncia gracias a la intervención del cardenal Cisneros, quien sustituyó a Deza al frente del Tribunal.

Legado y Carrera Académica

La carrera académica de Nebrija se desarrolló principalmente en las universidades de Salamanca (1475-1487 y 1505-1513) y Alcalá de Henares (1514-1522). Su actividad profesional se extendió durante más de medio siglo, desde 1470 hasta 1522.

Sus campos de actividad abarcaron la filología, la gramática, la lexicografía, la traducción, la exégesis bíblica, la docencia, la escritura, la poesía, la historia, la pedagogía, la impresión y la edición. Sus textos tratan temas tan diversos como el derecho, la medicina, la astronomía y la educación.

En una época en la que la comunicación es instantánea y el idioma evoluciona a una velocidad sin precedentes, la figura de Nebrija nos recuerda que la lengua es un organismo vivo que debemos comprender para cuidarlo y transmitirlo. Su ejemplo como humanista, defensor de la educación y el uso preciso del lenguaje, es especialmente relevante para todos los que trabajamos con palabras —docentes, comunicadores, traductores, redactores, editores— y para cualquiera que valore la riqueza cultural que encierra nuestro idioma.

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